Hoy, decidimos aventurarnos al lado opuesto de Aruba y tropezar con este encantador bar de playa. A nuestra llegada, el personal atento y el propietario nos recibieron calurosamente. Tuvimos la suerte de asegurar una mesa encantadora que ofrecía una vista pintoresca de la playa. Optando por la captura del día, que resultó ser el delicioso mero de aguas profundas, estábamos completamente satisfechos con su delicioso sabor. Aunque este establecimiento es de naturaleza bastante local, definitivamente vale la pena conducir si se dirige o regresa de Baby Beach. Si tenemos la oportunidad de volver a visitar esta impresionante isla, ¡sin duda haremos una visita de regreso a este bar de playa! ⭐️⭐️⭐️⭐️⭐️