Praia da Pedreira

DON'T GO THERE ALONE! There is a little house on the side of the beach. The man living there followed me up the hill. I stopped walking to leave him pass. He didn't speak English and just stood behind me. I called a friend because I was really afraid and asked him again to pass. He slowly walked by and I followed to see him and not having to be afraid that he will jump out of the bushes. He was getting slower and slower but luckily 2 persons came and I asked them to help me. They actually brought me back to my car. I was never so afraid before! Don't go there all alone!

Sin duda, la playa más agradable de la isla, aunque un poco difícil de alcanzar, es una verdadera joya. La arena es suave y lisa, a diferencia del terreno rocoso de otras playas. Es un lugar apartado, con apenas visitantes. Solo me encontré con dos personas a mi llegada, y justo cuando me iba, un grupo de cinco se dirigía hacia allí. Una visita a esta playa es realmente una experiencia que vale la pena saborear.

La playa es verdaderamente encantadora, sin embargo, llegar a ella puede ser toda una aventura. El descenso es bastante empinado, lo que lo convierte en un desafío. Las escaleras que se encuentran a la izquierda, entre dos casas, son una buena opción, pero es importante tener en cuenta que el camino a la derecha está actualmente bloqueado debido a un deslizamiento de tierra.

Este tesoro oculto de playa es una verdadera belleza, escondida de las multitudes y el bullicio de la ciudad. Tuvimos la suerte de tener toda la playa para nosotros, lo que hizo que fuera una experiencia inolvidable. Sin embargo, es importante tener precaución al darse un chapuzón en el océano, ya que no hay socorristas en servicio y las olas pueden ser bastante fuertes. A pesar de ello, este lugar sereno bien vale la pena el viaje.

Una ubicación impresionante y aislada, perfecta para darse un chapuzón refrescante y disfrutar del cálido sol.