Este es un lugar fantástico con fácil accesibilidad, e incluso puedes encontrar algunas áreas sombreadas si no tienes una sombrilla.
¡Esta playa es realmente increíble! El ambiente tranquilo es tan agradable y estoy muy feliz de estar aquí.
Esta playa está dividida en dos partes y tiene impresionante arena blanca y rocas sumergidas visibles durante la marea baja. La multitud es mayormente joven, con familias en un lado y personas más jóvenes de las áreas circundantes en el otro. Hay un encantador restaurante y bar en la entrada del estacionamiento y la playa, lo que la convierte en el lugar perfecto para pasar un día. No te pierdas el Quikafarz del jueves, una especialidad bretona popular. Ya sea que estés solo, con pareja o en grupo, esta playa es una visita obligada. Además, es accesible para personas con discapacidades.