El hotel es un encantador establecimiento familiar con un ambiente cálido y acogedor. Tiene un ambiente moderno pero relajado. El personal es amable y profesional, brindando un servicio excepcional.
Tanto el hotel como sus alrededores son prístinos y bien mantenidos, con una limpieza impecable. Cada habitación está equipada con aire acondicionado y un televisor de alta definición que ofrece canales locales e internacionales.
Situado a solo un corto paseo de la franja principal de la ciudad, el hotel garantiza una experiencia tranquila y sin preocupaciones. Si bien la playa en el frente puede tener una costa ligeramente rocosa, hay un impresionante bar de arena a pocos metros de la orilla. El hotel ofrece zapatos de baño, aletas, máscaras y otras comodidades para su conveniencia. Además, las bicicletas están disponibles para que los invitados lo usen. Los miembros del personal hablan múltiples idiomas, y los alimentos y bebidas ofrecidos son de excelente calidad. Sin mencionar que el hotel ofrece impresionantes vistas del mar y el Monte Olimpo. Recomiendo encarecidamente este lugar.