Después de explorar la costa de Oregón durante más de 25 años, podemos decir con confianza que esta playa es una de nuestras favoritas de todos los tiempos. Si bien el comienzo del sendero no está marcado, Google Maps lo llevará en la dirección correcta. El sendero en sí es corto pero empinado, por lo que es mejor evitarlo cuando está húmedo y fangoso. A medida que te acercas al agua, encontrarás varios acantilados, algunos de los cuales son bastante altos. Para llegar a la playa y al agua debajo, deberás trepar por la cara de una roca, que es un descenso de unos 20 pies. Si bien no es una escalada técnica, puede ser resbaladizo cuando está mojado. Sin embargo, incluso si no llegas hasta abajo, aún disfrutarás de algunas de las vistas más impresionantes de la costa sur de Oregón.
Durante nuestra última visita, nos sorprendió la gran cantidad de nutrias y focas/leones marinos en la zona. Dejamos de contar en 50, pero sin duda había muchas más. Si eres amante de la naturaleza, esta playa es una visita obligada.