Esta sección de la isla es absolutamente impresionante y exquisitamente hermosa. Es pacífica, tranquila e increíblemente serena. Sin coches a la vista, el único transporte que verás son algunos barcos y ferries que entran y salen cada día. Hay un par de lugares donde puedes disfrutar de una refrescante bebida o una deliciosa comida. También encontrarás a una encantadora señora que vende mermeladas, aceites de oliva, licores y licores hechos localmente. El agua aquí es cristalina, cálida y rebosante de pequeños peces que nadan a tu alrededor mientras te das un chapuzón. Es pura felicidad.