Esta parte de la isla presume de tener una de las playas de arena negra más finas y es definitivamente recomendable visitarla. Sin embargo, se aconseja usar calzado antideslizante, ya que el camino que lleva a la playa puede ser bastante rocoso y empinado en algunas áreas. En caso de lluvia, hay que ser especialmente cuidadoso ya que el camino puede volverse resbaladizo. Es importante señalar que esta playa es conocida por tener bañistas desnudos, así que hay que estar consciente de ello. Nosotros nos topamos con este hecho de manera inesperada, pero no disminuyó nuestro disfrute de la playa. En general, recomiendo encarecidamente una visita a esta impresionante playa.
Cuando fuimos a la playa, notamos que tenía una costa rocosa y las olas eran bastante fuertes. Fue la primera playa de arena negra que visitamos en la isla. Desafortunadamente, no pudimos localizar el hot, que fue mencionado en el mapa y por otros revisores.
Visitamos la playa en mayo de 2022 y pudimos aparcar junto a la carretera antes de caminar hasta el océano, lo cual nos llevó aproximadamente de 10 a 15 minutos. Desafortunadamente, la carretera que lleva al agua ha sido bloqueada al público debido a preocupaciones de seguridad tras la última erupción. Han pasado unos 20 años desde que se podía conducir hasta la playa, nadar, ver tortugas marinas y comprar souvenirs. Hoy en día, la playa está principalmente cubierta de Pahoehoe (lava suave) y acantilados, por lo que no es aconsejable intentar bajar al agua ya que sería peligroso. No obstante, los lugareños fueron hospitalarios y disfrutamos de su kombucha casera y otros manjares.