Esta playa es verdaderamente impresionante. Aunque pueda estar llena de gente y el agua pueda ser un poco fría, el impresionante paisaje y las impresionantes olas hacen que todo valga la pena. Además, hay un lugar fantástico para escalar en el lado derecho de la playa. Sin embargo, prepárate para un poco de desafío cuando se trata de estacionamiento; puede ser un poco complicado, pero el resultado final vale la pena. Alternativamente, puedes dar un paseo relajante hacia la playa y disfrutar de las vistas a lo largo del camino.
Esta playa es una joya escondida para aquellos que disfrutan de paseos tranquilos y recolectar rocas. La playa cuenta con algunas de las rocas más distintivas que seguramente llamarán tu atención. Aunque el agua puede estar fría, la playa ofrece una atmósfera pintoresca y pacífica que es frecuentada tanto por locales como por turistas. Además, hay un baño portátil bien mantenido ubicado al otro lado de la calle en el área de estacionamiento. Como muchas playas en el norte de Maine, ésta no está abarrotada, lo que la convierte en un lugar ideal para relajarse y admirar el impresionante paisaje.
La playa ofrece estacionamiento gratuito y no está demasiado lleno. Consiste en una costa mayormente rocosa con algunas áreas arenosas. La mayoría de las rocas son suaves, y aunque no me encontré con muchas conchas o vidrio marino, el agua es increíblemente clara. ¡Recomiendo encarecidamente esta playa y definitivamente regresaré en el futuro!
Esta playa es impresionante y convenientemente ubicada cerca de mi hogar. Desde que me mudé aquí hace dos años, he descubierto una gran cantidad de rocas y conchas interesantes. Al comienzo del verano, hay restricciones para llevar perros, pero a partir de octubre, se les permite estar en la playa.
Esta playa en Maine es de propiedad privada, pero su belleza supera a cualquier otra en la zona. Si tienes la fortuna de recibir una invitación para visitarla, considérate entre los afortunados pocos.