Esta impresionante playa presume de aguas cristalinas que profundizan gradualmente a pocos metros de la costa. La costa está adornada con arena suave y pequeñas rocas, lo que hace innecesario el uso de zapatos de natación. Aunque se ofrecen tumbonas por un precio fijo de 15€, se recomienda llegar temprano para asegurar un lugar privilegiado. El snorkel es una opción aceptable en los lados de la playa, aunque no hay mucho que ver. Dos tabernas/bares se encuentran convenientemente ubicados cerca para comer y beber. La playa se encuentra a 25 minutos en autobús (6€ ida y vuelta) desde la ciudad de Pigadia, serpentenando por las colinas en un camino sinuoso. Tenga en cuenta que algunos barcos están estacionados en el área, lo que limita ligeramente el espacio de natación. En general, esta playa es sin duda una de las mejores en Karpathos.