La experiencia en la playa fue bastante decepcionante, ya que no parecía valer la pena la visita. Al llegar, nos encontramos con varios perros callejeros que parecían agresivos y representaban una amenaza para nuestra seguridad. La atmósfera general de la playa estaba desierta, lo que nos hizo sentir incómodos, especialmente porque estábamos con nuestra familia. Además, no encontramos muchas conchas, lo que podría haber sido debido a la temporada baja.