La playa de Malpe es increíblemente limpia y espaciosa, lo que la convierte en un lugar ideal para pasar una relajante velada con amigos y familiares. A pesar de la gran cantidad de personas que la visitan, hay suficiente espacio para jugar y disfrutar de las olas (aunque es importante ser cauteloso y permanecer en aguas poco profundas debido al terreno irregular). La playa ofrece una sensación de libertad y oportunidades interminables para divertirse y explorar. Incluso pudimos jugar al fútbol y al voleibol sin sentirnos abarrotados. Como familia, visitamos la playa de Malpe varias veces al año y siempre la pasamos genial. Es un destino turístico popular con muchas tiendas, cafeterías y puestos de mariscos, así como un buen hotel para aquellos que viajan desde otras partes del país. Para los más aventureros, también hay actividades como el paracaidismo y los botes de velocidad disponibles. La calle está bordeada de tiendas y otras atracciones, convirtiendo a la playa de Malpe en un destino obligado para visitar.