Nunca antes había visto una playa tan sucia como ésta en Bali. La cantidad de basura que ensucia la orilla es abrumadora, y mi foto solo captura una pequeña fracción de la interminable correa de basura que parece que a nadie le importa limpiar. Me desconcierta cómo alguien podría dejar una reseña de 5 estrellas y afirmar que la playa está limpia. Para empeorar las cosas, los habitantes locales han instalado una barrera de peaje en el camino que lleva a la playa, obligando a los visitantes a pagar una tarifa solo para acceder a la playa contaminada. Los restaurantes de mariscos cercanos sirven a sus huéspedes a solo unos metros de la basura. Está claro que esta playa es una trampa para turistas, diseñada para engañar a visitantes desprevenidos. Es una lástima que un lugar tan hermoso se haya permitido convertirse en una vergüenza para Bali. No recomendaría esta playa a nadie, y les insto a evitarla si valoran su salud y el medio ambiente.