La playa es una porción de paraíso prístino e inmaculado. Hoy no estaba en absoluto abarrotada, ofreciendo una atmósfera serena y tranquila. La presencia de vigilantes salvavidas, así como cómodas tumbonas y sombrillas, añade a la comodidad y seguridad de los visitantes. Sin embargo, puede resultar un poco confuso determinar qué camas son gratuitas y cuáles requieren pago. Es altamente recomendable llevar zapatos de agua, ya que la entrada al mar es bastante rocosa y puede resultar dolorosa para los pies. No obstante, el agua es cristalina y sorprendentemente hermosa, convirtiéndola en un lugar ideal para un refrescante baño.