La playa cuenta con una extensión de arena agradable, limpia y bien organizada. Hay un bar y un restaurante de autoservicio, pero las opciones gastronómicas son limitadas. Lamentablemente, la conexión wi-fi gratuita es muy débil. Resulta casi imposible asegurar un lugar en la playa de arena a menos que se tenga una suscripción de temporada. Sin embargo, hay dos piscinas con un pequeño tobogán que resulta bastante entretenido. La playa no está abarrotada y resulta bastante relajante, aunque también es bastante costosa. Además, el estacionamiento es bastante caro y se encuentra a 15 minutos a pie de la playa. Se recomienda reservar con anticipación por teléfono.