La playa es un paraíso prístino, libre de cualquier rastro de contaminación. Es un lugar idílico para un retiro pacífico con tus seres queridos. Uno de los lados de la playa cuenta con un impresionante mirador, mientras que el otro conduce al encantador pueblo de Choyudo. Aquí, encontrarás una variedad de tiendas y palapas que venden pescado y mariscos frescos. Para aquellos que buscan aventura, hay pangas disponibles para alquilar y explorar las aguas serenas. La playa ofrece un escape refrescante del ajetreo y el bullicio de la vida urbana, permitiéndote respirar el aire puro y limpio y relajarte. Es el destino perfecto para una escapada de fin de semana rejuvenecedora, y lo adoro absolutamente.