Verdaderamente un paraíso tropical con playas cristalinas de color turquesa, lagunas impresionantes, vegetación increíble y encantadores habitantes indígenas. Le recomiendo encarecidamente incluirlo en su próximo itinerario por el Pacífico Sur. Solicite un guía nativo que lo lleve a los bungalows tradicionales, las pasarelas históricas, las cavernas y las capillas. El ambiente es increíblemente relajado y, a veces, conversar en inglés puede ser un poco desafiante, pero solo aumenta el atractivo.