La playa es absolutamente fantástica, con un lado perfecto para surfear y el otro lado con un arroyo tranquilo adecuado para personas de todas las edades y diversas actividades en la playa. Además, hay un cómodo aparcamiento y un baño público situado cerca del Brighton Surf Club, lo que facilita el acceso a la playa. La presencia de formaciones rocosas y pequeñas islas también la convierte en un paraíso para los fotógrafos.