Hace dos días, noté un letrero en la entrada del restaurante de playa que decía "no se permiten perros". Esta política puede decepcionar a algunos dueños de perros, pero es comprensible ya que ayuda a mantener la limpieza e higiene en la playa. La playa en sí es un lugar hermoso para pasar un día, con su suave arena, aguas cristalinas y vistas impresionantes. Es un lugar ideal para tomar el sol, nadar y relajarse. La playa está bien cuidada y hay muchas comodidades disponibles, incluyendo baños, duchas y puestos de comida. En general, tuve un tiempo maravilloso en la playa y la recomendaría altamente a cualquiera que busque un día pacífico y agradable.