La playa de Gandía es bastante impresionante, se extiende por kilómetros y cuenta con una amplia extensión de arena. El agua está relativamente limpia por la mañana y puedes caminar bastante antes de que sea demasiado profunda. Sin embargo, vale la pena señalar que las medusas se pueden ver cada 200-300 m más o menos. Junio es un momento ideal para visitar, con un clima agradablemente caluroso y agua cálida y refrescante. Los fines de semana pueden estar bastante ocupados, pero la playa realmente se llena en julio y agosto, lo que dificulta encontrar un lugar. Septiembre también es un buen momento para disfrutar de la playa. Los restaurantes locales sirven deliciosa paella y arroz meloso, aunque el caldo utilizado puede dominar el delicado sabor de la langosta. Hay chiringuitos cada 200m, perfectos para disfrutar de un cóctel y relajarse. Si bien la playa de Gandía no se puede comparar con las playas de Ibiza, definitivamente vale la pena visitarla.