Es difícil poner en palabras la belleza de Barra do Cahy. El camino que lleva a la playa puede ser de tierra con algunos baches, pero no es nada que un coche normal no pueda manejar. Optamos por Fox y no tuvimos problemas para llegar allí. Una vez que llegamos, nos quedamos impresionados por el impresionante paisaje. Las olas del océano eran fuertes, pero eso solo agregaba encanto a esta joya escondida. Después de caminar unos 800 metros, nos encontramos con un río y un hito que señalaba la llegada de los portugueses. Nuestra estadía en Muzuko Beach Bar fue perfecta, con un servicio excepcional que nos hizo sentir como en casa. Si estás planeando un viaje al sur de Bahía, Barra do Cahy es un destino que no puedes perderte. ¡Créenos, la belleza de este lugar es impresionante!