La playa en Koh Samet es absolutamente espléndida. La arena es de un blanco brillante y el agua es cristalina, lo que hace que sea una vista verdaderamente impresionante. Además, hay numerosos bares en las cercanías, perfectos para aquellos que disfrutan de una bebida refrescante mientras se relajan al sol. Para un poco de aventura, se puede hacer un viaje en barco alrededor de las seis islas de la zona. Por las noches, los bares ofrecen espectáculos de fuego, que son un verdadero deleite para los sentidos. En general, definitivamente es un lugar que debería estar en su lista de destinos imprescindibles.