Llamé con 30 minutos de anticipación para hacer una reserva para un grupo de 8 personas, y no tuvimos ningún problema para conseguir una mesa. Al conducir hacia la playa, asegúrate de llevar alguna forma de identificación porque el hotel está ubicado en una carretera privada y hay un pequeño puesto de control de seguridad. Una vez que llegamos, nos sentaron de inmediato y recibimos saludos muy cálidos tanto del personal del hotel como del restaurante, aunque me sentí un poco informal. La comida fue exactamente lo que esperaba, de la más alta calidad. No soy un experto en carne, pero definitivamente recomendaría probarla solo por la experiencia. El personal de espera fue increíblemente educado y atento, hasta el punto de que llamarlos atentos sería quedarse corto. Por último, si no estás seguro de por qué deberías ir, simplemente diría que la vista por sí sola definitivamente lo vale.