La bahía es realmente magnífica, con sus encantadores hoyuelos que brindan amplia protección. Sin embargo, es desalentador ver a muchos visitantes de fuera dejando su basura atrás. Los humanos pueden ser las criaturas más dañinas para su entorno, a diferencia de cualquier otra. Personalmente, ni siquiera puedo deshacerme de un trozo de papel pequeño. Siempre llevamos bolsas cuando vamos a nadar para asegurarnos de mantener la limpieza. Estos hermosos alrededores son un regalo precioso para las futuras generaciones, así que les ruego que no tiren basura. Afortunadamente, el municipio ha proporcionado contenedores de basura. No puedo evitar preguntarme, ¿son tan desalmados? Solo se necesitan unos pocos pasos para desechar correctamente sus desechos. Insto al municipio a considerar la implementación de limpiezas regulares de la playa.