La abundancia de basura esparcida por la playa es desalentadora. Es una lástima presenciar cómo la belleza natural de este lugar se ve empañada por la presencia de desechos, vidrios, bolsas y colillas de cigarrillos. No puedo evitar preguntarme por qué las personas eligen contaminar esta zona de manera tan imprudente. Resulta difícil comprender cómo una playa tan prístina como la del futuro sitio de los Maestros puede permanecer limpia, mientras que ésta se encuentra en un estado tan lamentable.