El camino que conduce a la playa es bastante duro, con aproximadamente 15 kilómetros de que está en malas condiciones. Se tarda al menos 45 minutos en conducir a través de esta sección, y debido a su naturaleza desolada, algunas personas pueden sentirse inciertas sobre llegar a su destino. Además, hay una falta de señalización en el camino. El costo de entrada del vehículo es de 80 TL por día, y si planea establecer una tienda de campaña, hay una tarifa adicional de 280 TL por noche. Solo aceptan pagos en efectivo, y desafortunadamente, hay una recepción telefónica poco confiable en el área. Si bien no hay electricidad disponible, hay una instalación de baño, aunque se pueden hacer mejoras para garantizar un entorno seguro en medio de la pandemia en curso. El agua en la playa estaba excepcionalmente limpia y agradablemente cálida cuando visitamos. La playa en sí era increíblemente hermosa. Permití que mis dos hijos, de 8 meses y 3 años, jugaran en el agua. Además, se proporcionaron duchas y cabañas de aderezo. El buffet ofreció varios bocadillos como cola, alcohol, pan y papas fritas. En general, calificaría mi experiencia un 3 porque el mar era bastante ondulado y el mantenimiento de las instalaciones podría mejorarse.