La playa es impresionantemente serena y prístina, con la ventaja adicional de permitir perros con correa. Sin embargo, debido a la presencia de gripe aviar y algunos gaviotas fallecidas, es importante mantener a tu amigo peludo bajo control. La arena es impresionantemente hermosa, que se transiciona en guijarros y pizarra. El National Trust administra el estacionamiento, que cuesta £5 por todo el día, y un encantador camino conduce a la playa. Hay baños públicos disponibles, así como un encantador café y bar amigable para perros. En general, es un lugar verdaderamente magnífico que merece una calificación de cinco estrellas.