Esta es mi playa favorita todos los veranos. Es fantástico: no hay demasiada gente y hay olas frecuentes. Puede que el agua no esté muy cálida, pero aun asà es agradable relajarse en la cálida arena junto a las dunas. La marea baja bastante, lo cual es perfecto para que los niños construyan castillos de arena, ¡solo asegúrate de vigilarlos! ¡Lo recomiendo altamente!