Este encantador pueblo pesquero ha cautivado mi corazón. Observar a los hábiles pescadores desembarcar su fresca captura y ordenar sus redes mientras se sientan en el muelle es una experiencia encantadora. Aunque la playa puede no ser ideal para tomar el sol, la impresionante vista del atardecer y las refrescantes oportunidades de nadar lo compensan. El pueblo cuenta con una abundancia de pintorescas tiendas y deliciosos restaurantes, convirtiéndolo en un destino obligado para cualquier turista tranquilo que busque un sabor de la cultura local. En general, la atmósfera única y la experiencia auténtica hacen de este pueblo pesquero una joya escondida que vale la pena descubrir.
Disfrutamos de un encantador retiro de tres días en este pintoresco pueblo costero. Altamente recomendado. La playa está adornada con suaves guijarros y el agua es cristalina. A pesar de que nuestra estancia estuvo acompañada de vientos fuertes, las olas salvajes fueron un éxito entre todos nosotros. Las dos tabernas locales son una visita obligada. Aunque algunos visitantes vienen por un viaje de un día, sugerimos quedarse más tiempo. Por favor, tenga en cuenta que un automóvil es necesario para el transporte ya que no hay autobuses ni tiendas en las cercanías.
Deze specifieke kustplek is een ware schatkamer. Het oceaanwater is zo transparant dat het lijkt alsof je in een kristal zwemt, en het strand strekt zich uit over een aanzienlijke lengte, waardoor een rustige sfeer ontstaat. Het uitzicht op de rotsachtige kaap is simpelweg adembenemend en draagt bij aan de algehele schoonheid van de plek.
Nos topamos con esta hermosa playa mientras conducíamos y tuvimos todo el lugar para nosotros durante una tarde fantástica.