La playa es verdaderamente magnífica, pero llegar a ella puede ser bastante desafiante. El camino hacia esta impresionante costa no es para los débiles de corazón, pero la recompensa vale la pena el esfuerzo. La belleza natural de esta playa apartada es impresionante, y la atmósfera pacífica es perfecta para la relajación y la rejuvenecimiento. Sin embargo, el camino hacia esta joya escondida no es fácil, y requiere un poco de esfuerzo físico. Si estás dispuesto al desafío, esta playa definitivamente merece una visita.
Tras un breve pero empinado descenso y a través de una pequeña garganta, se encontrará la Bahía de Trafoulas. Esta extraordinaria cala, que recuerda al planeta rojo Marte, presume de aguas prístinas y translúcidas y de una escasa población de visitantes.