Esta hermosa playa presume de aguas cristalinas y arena suave y empolvada. Sin embargo, la vista pintoresca puede ser algo empañada por la presencia de un gran número de campistas. Además, en días especialmente ventosos, la arena puede convertirse en un poco de molestia. Afortunadamente, hay una encantadora cafetería y taberna cercana donde puedes tomar un descanso y disfrutar de una refrescante bebida. A pesar de estos contratiempos menores, esta playa sigue siendo un lugar maravilloso para disfrutar del sol y relajarse.
Tropezamos con la playa más excepcional de Evia. La playa está acompañada por un impecable café que ofrece bebidas calientes, hamburguesas y hot dogs. La playa está adornada con cuevas y rocas naturales, convirtiéndola en un lugar ideal para pasar un día entero.
Zarakon es una playa pequeña encantadora y pacífica, con solo algunas piezas de plástico dispersas aquí y allá. La costa está mayormente libre de piedras, lo que la convierte en un gran lugar para relajarse y tomar el sol.
La playa ofrece un increíble espectáculo de la belleza natural, aunque puede resultar desafiante para algunos. Sin embargo, el agua es una vista digna de admiración, a pesar de que contiene algunos restos ásperos y una abundancia de algas marinas.
Esta playa dejó a mi prometido y a mí boquiabiertos. Quedamos enamorados de su ambiente tranquilo, sin olas a la vista. Los primeros 30 pies de agua son poco profundos, mientras que el resto se torna más profundo, proporcionando lo mejor de ambos mundos. No obstante, es importante mencionar que llevar una sombrilla es altamente recomendado, ya que la alternativa es pagar $10 por un par de sillas de playa y bebidas caras. Sin embargo, la serenidad y la belleza de esta playa hacen que valga la pena cada centavo.