Zarakon es una playa pequeña encantadora y pacífica, con solo algunas piezas de plástico dispersas aquí y allá. La costa está mayormente libre de piedras, lo que la convierte en un gran lugar para relajarse y tomar el sol.
La playa ofrece un increíble espectáculo de la belleza natural, aunque puede resultar desafiante para algunos. Sin embargo, el agua es una vista digna de admiración, a pesar de que contiene algunos restos ásperos y una abundancia de algas marinas.
Esta playa dejó a mi prometido y a mí boquiabiertos. Quedamos enamorados de su ambiente tranquilo, sin olas a la vista. Los primeros 30 pies de agua son poco profundos, mientras que el resto se torna más profundo, proporcionando lo mejor de ambos mundos. No obstante, es importante mencionar que llevar una sombrilla es altamente recomendado, ya que la alternativa es pagar $10 por un par de sillas de playa y bebidas caras. Sin embargo, la serenidad y la belleza de esta playa hacen que valga la pena cada centavo.
Si bien tengo una debilidad por las playas pintorescas y apartadas, esta en particular no logró capturar mi corazón y dejarme maravillado.
¿Buscas un destino fantástico para disfrutar de un tiempo de calidad con tus seres queridos? ¡No busques más que esta playa! Es un lugar ideal para pasar tus vacaciones, con muchas oportunidades para la relajación y la diversión bajo el sol. Ya sea que busques tomar el sol, darte un chapuzón en las aguas cristalinas o simplemente relajarte con un buen libro, esta playa tiene algo para todos. ¿Por qué no empacas tus maletas y te diriges a este maravilloso destino hoy mismo? ¡No te arrepentirás!