La playa estaba lejos de ser ideal - una costa sucia y rocosa en un área altamente comercializada. No es un lugar donde quisiera volver a visitar
Este lugar es una verdadera joya de paraíso - un lugar de belleza impresionante, con una vista impresionante, perfecto para una escapada romántica o unas vacaciones divertidas en familia. La arena es suave y cálida, mientras que el agua es cristalina e invitante. La vida silvestre abunda, con aves y otros animales que hacen su hogar aquí. Es un lugar de relajación, un lugar para olvidar los problemas del mundo y disfrutar de la serenidad de la naturaleza.
Tuve una experiencia extremadamente negativa en la playa. Después de un largo viaje nocturno, llegué para descubrir que era un desastre total. La área que vi fue solo de 200-300 metros de Camping Playa de Poniente, pero fue suficiente para hacerme decidir que nunca querría volver. La arena no era arena en absoluto, sino más bien arcilla, gris y completamente poco atractiva. Estaba llena de cristales rotos y colillas de cigarrillos, como si la noche anterior hubiera habido una fiesta salvaje. El aire era nebuloso y todo se pegaba a ti, haciéndote sentir sucio incluso después de una ducha. El paisaje era plano y poco atractivo, y aunque las montañas estaban cerca, todavía daba una sensación de insalubridad. Había elegido esta área porque había oído que era no desarrollada, pero no estaba preparado para el desorden que encontré.
Este lugar es un paraíso absoluto: sus aguas son increíblemente claras y no hay demasiados turistas, lo que lo hace más atractivo para los locales. Además, es fácil de acceder y hay un gran café justo en la playa también.