Bonito, pero puede ser muy ventoso. Asegúrate de llevar chalecos de viento y estarás listo!
Este lugar está lejos de ser ideal. Promedio como máximo y el bar no es nada especial. El postre es la Ăşnica caracterĂstica redentora, pero ni siquiera eso es digno de menciĂłn. Si estás desesperado, puede servir, pero no lo recomendarĂa a nadie.
Esta playa nudista aislada está escondida entre las rocas y está a solo un corto paseo de la playa principal, a solo 50 metros al norte, cruzando el arrecife.
Lugar perfecto para aquellos que buscan una experiencia salvaje y virgen. Sin servicios ni sombra, podrás apreciar la belleza de la naturaleza en su forma más pura. El paisaje es impresionante y la playa es más grande y más abierta al mar que su vecino, Playa del Papagayo. Sin embargo, las aguas pueden estar un poco más agitadas, asĂ que asegĂşrate de mantener un ojo cercano. Para llegar allĂ, puedes estacionar en Playa del Papagayo y luego dar un paseo relajado de 10-15 minutos hasta Playa del Pozo.
Gran playa para pasar el dĂa - no hay instalaciones, pero es limpia, amigable y absolutamente impresionante. La playa principal tiene una costa arenosa y rocas debajo de la superficie, pero tambiĂ©n hay algunas hermosas bahĂas aisladas con acceso arenoso. Si quieres conseguir un buen lugar, es mejor llegar temprano ya que puede estar bastante concurrido más tarde en la mañana.
Las playas de este parque nacional pueden ser un poco difĂciles de llegar y tendrás que pagar la tarifa de entrada de 3 euros para entrar. Pero si estás buscando una playa, vale la pena el esfuerzo. Los más cercanos a los aparcamientos suelen ser los más concurridos y es posible que incluso veas algo de desnudez. Hay un bar con personal amigable cerca, pero puede que no valga la pena el esfuerzo. Todo sea dicho, es una experiencia poco atractiva.