Las playas de este parque nacional pueden ser un poco difĂciles de llegar y tendrás que pagar la tarifa de entrada de 3 euros para entrar. Pero si estás buscando una playa, vale la pena el esfuerzo. Los más cercanos a los aparcamientos suelen ser los más concurridos y es posible que incluso veas algo de desnudez. Hay un bar con personal amigable cerca, pero puede que no valga la pena el esfuerzo. Todo sea dicho, es una experiencia poco atractiva.
Es el lugar perfecto para un chapuzĂłn! El agua cristalina y las olas rompiendo hacen que sea una experiencia de nataciĂłn idĂlica. Puedes alquilar una máscara y un snorkel o incluso tomar una clase de buceo. Hay muchos peces para ver, asĂ que es ideal para los buceadores. Escucharás el sonido del compresor de buceo, pero es parte del encanto. Hay duchas gratis, aparcamiento gratuito y buenas vibraciones, por lo que es el lugar perfecto para un dĂa en la playa.
La playa cerca de Playa Quemada, oficialmente conocida como Playa del Pozo, es un gran lugar para visitar. Es fácilmente identificable por la flecha en el sendero y el pozo que se encuentra allĂ, un nombre que los lugareños le han dado durante muchos años. Además, esta playa es Ăşnica por su arena gris y guijarros.
Un gran lugar - ¡si no te importan los vientos! AsegĂşrate de llevar un deflector para estar cĂłmodo. El agua está frĂa, pero los restaurantes y bares cercanos lo compensan. Además, las aceras están impecables y puedes incluso alquilar un patinete elĂ©ctrico!
Ese lugar tiene playas de arena hermosas, agua cristalina y comodidades como duchas, máquinas de ejercicio, un bar en la playa y socorristas. Definitivamente es mi playa favorita en esta parte de la isla.