Este encantador pueblo costero ubicado en Tailandia es, con mucho, mi destino más querido. La playa es absolutamente impresionante y perfecta para nadar, con la ventaja añadida de estar libre de cualquier barco. Sin embargo, es desalentador ver los desechos de plástico que ensucian la costa, especialmente después de una tormenta. Para evitar ser picado por pulgas de arena, se recomienda usar una camiseta mientras pasea o nada por la playa. El paisaje natural sigue siendo prístino e intocado, sin grandes desarrollos a la vista. Los lugareños son cálidos, acogedores y siempre dispuestos a ayudar. Los precios son razonables, lo que lo convierte en un destino de vacaciones asequible. Hay un puñado de restaurantes en la zona que sirven platos tailandeses y europeos deliciosos, como Seaview (un restaurante local de mariscos), Volcano (cocina mediterránea) y Maliblues (cocina italiana). Una pequeña ciudad de mercado llamada Saphli se encuentra cerca de la playa y ofrece un mercado de verduras y pescado delicioso junto con tiendas de conveniencia. Para aquellos que anhelan productos extranjeros y europeos, una carretera cerca de Thung Wualen tiene una tienda que vende pan y otras delicias. Si bien hay algunos farang mayores que residen en Thung Wualen, la comunidad sigue siendo acogedora para todos. Desafortunadamente, la ocasional basura de plástico que llega a la playa y la contaminación del aire por la quema de cultivos y residuos restan valor a la imagen idílica en general.
La playa, una vez prístina e intocada, ha sucumbido desafortunadamente a los efectos negativos del desarrollo humano. La construcción de un hotel-condominio ha arruinado la belleza natural de la zona, dejándola llena de basura e inhóspita. Es una lástima que este paraíso, una vez inmaculado, haya caído víctima de las manos del progreso.
This beach is absolutely beautiful, with its pristine white sands, coconut trees, and rocky cliffs. It's considered one of the best beaches in Thailand and remains untouched and peaceful.
Esta playa es una absoluta delicia, desprovista de cualquier distracción como sillas o motos acuáticas, permitiendo un ambiente sereno y tranquilo.