El lugar de vacaciones por excelencia para el sol, la arena y el surf. Pero seamos honestos, es solo una caja de arena glorificada con un lado de agua salada.
Claro, las olas rompiendo contra la orilla pueden ser relajantes, y el cálido sol en la piel puede ser relajante. Pero no nos olvidemos de las multitudes, las gaviotas que no te dejan en paz y la arena que parece llegar a todas partes (y quiero decir a todas partes).
No me malinterpretes, la playa puede ser un buen cambio de ritmo de la rutina diaria. Pero no pretendamos que es una especie de paraíso. Es solo una franja de tierra arenosa donde la gente va a broncearse y tomar algunas fotos dignas de Instagram.