Hicimos una breve parada en este encantador pueblo pesquero para estirar las piernas antes de emprender un largo viaje. El mar verde y refrescante viento frío fueron deliciosos. El mercado local ofrece capturas frescas del día en las primeras horas, y disfrutamos de la sencilla pero sabrosa cocina malaya en un restaurante cercano. ¡El assam pedas era tan exquisito que no pudimos resistirnos a tomar tres raciones de arroz! También observamos que los chalets están actualmente en construcción y estarán disponibles para su ocupación a mediados de 2023.