La playa era un gran lugar - el mar era cristalino en el medio y aun cuando habĂa algas en ciertas áreas, todavĂa habĂa muchos buenos lugares para disfrutar. El mar era poco profundo al principio, pero todavĂa se podĂa nadar bien. El agua era muy agradable, incluso durante julio y septiembre. Además, es fácil llegar a la isla de Formentera en barco desde aquĂ
Alcanzar esta playa no es un paseo, pero no es un problema importante. Si quieres aprovechar al máximo tu visita, deberĂas traer algunas zapatillas de baño: es imposible disfrutar de esta playa sin ellas. La arena está cubierta de piedras de todas las formas y tamaños, y todas son peligrosamente resbaladizas. El agua es muy poco profunda, por lo que sentirás la algas viscosas y otras plantas acuáticas en el fondo con los pies: no es una experiencia agradable. A pesar de esto, la playa es bastante pequeña, bonita y no demasiado concurrida.
Estábamos buscando una bonita playa para tomar el sol y llegamos en coche. La playa era fácilmente accesible y probablemente un lugar mucho mejor para visitar en barco. Desafortunadamente, la costa estaba llena de algas (parecĂa abono) haciĂ©ndola bastante fangosa y de color marrĂłn. El agua más lejos era clara, pero el terreno rocoso la hacĂa poco atractiva para nadar. Se recomiendan buenas zapatillas de agua. El quiosco de la playa olĂa bien y estaba ocupado, por lo que era atractivo.
Definitivamente vale la pena visitar esta pequeña cala oculta. Las vistas son absolutamente impresionantes, creando una atmĂłsfera muy idĂlica. Es importante traer suficiente agua ya que es bastante remota. Decidimos alquilar bicicletas de montaña en Old Town y recorrimos el camino costero para llegar allĂ, y recomiendo hacer lo mismo.