Si bien puede resultar un desafío encontrar la entrada, una vez que llegues a esta playa te encontrarás con una vista impresionante del mar. El agua es cristalina y prístina, ofreciendo un escape refrescante del ajetreo y el bullicio de la vida cotidiana. No olvides tomarte un momento para contemplar la lejana Isla Guishan, realmente es una vista para contemplar. En general, esta playa es una joya escondida que definitivamente vale la pena visitar.