Playa Carate

Si eres el tipo de persona que solo se preocupa por las playas, entonces Costa Rica no es el lugar para ti. Claro, los alrededores son impresionantemente hermosos, pero seamos realistas, no estás aquí por la exuberante vegetación o la fauna exótica. No, estás aquí por la arena y el mar, y en ese departamento, Costa Rica se queda corta. Entonces, si todo lo que quieres es una aburrida playa vieja, es mejor que vayas a otro lugar.

En aquellos tiempos, conducir hasta Carate era como navegar por un pantano. La carretera estaba llena de enormes charcos que podían tragarse un coche pequeño entero. Pero bueno, ¿quién se preocupa por eso cuando tienes pequeños charcos con los que lidiar? Es como jugar al esquiva-el-topo, pero con tu coche en lugar de con un animal. Buenos tiempos, buenos tiempos.

La semana pasada, emprendí un viaje a la playa en un sedán. Aunque el viaje fue un poco largo, el destino valió absolutamente la pena. En el camino, nos topamos con un servidor servicial que añadió a la experiencia general. Recomiendo encarecidamente este viaje, definitivamente vale la pena repetirlo 1000 veces.

El camino que lleva a esta playa puede ser un poco desafiante para un sedán debido a las piedras sueltas y de gran tamaño dispersas a lo largo del camino. Nuestro viaje en un Rush 4x2 desde Puerto Jiménez duró alrededor de una hora y cuarenta minutos. Las olas eran moderadas, pero había una corriente de resaca notable. Es recomendable llevar todos los suministros necesarios ya que el lugar más cercano para reabastecerse está a 40 minutos de distancia. Sin embargo, el aislamiento de esta playa es una ventaja, ya que hay muy pocas personas alrededor, lo que permite una experiencia pacífica y serena. Desafortunadamente, los mosquitos salen en masa tan pronto como se pone el sol, por lo que es mejor estar preparado con un repelente de insectos. En general, lo pasamos genial y recomendaríamos esta playa a cualquiera que busque una escapada apartada y tranquila.

Our visit to the beach was nothing short of extraordinary. We had the privilege of exploring Corcovado via the Lioness, which made for a truly unforgettable experience. The beach itself was stunning, with crystal clear waters and soft, powdery sand. The sound of the waves crashing against the shore was soothing and provided a sense of tranquility. We spent hours basking in the warm sun, taking in the breathtaking views and relishing in the beauty of nature. It was a truly magical escape from the hustle and bustle of everyday life. We highly recommend visiting this beach for an unforgettable experience.