La ubicación de esta playa es verdaderamente excepcional. La mezcla de arena y grava crea una vista pintoresca que no tiene igual. Para aquellos que buscan economizar, hay amplio espacio disponible de manera gratuita, y se pueden alquilar tumbonas a un precio asequible de 8€ por día. El mar es cristalino, lo que lo hace perfecto para hacer snorkel y stand-up paddleboarding, con una gran cantidad de peces y vida submarina para admirar. Además, hay una tienda de comestibles bien surtida y varias tabernas excelentes ubicadas a solo 20 metros de distancia. Esta playa es fácilmente uno de los mejores lugares de la isla, superando incluso a Kallithea y Faliraki. Sin embargo, hay un gran inconveniente que no se puede ignorar. La playa está llena de colillas de cigarrillos, lo que resta significativamente de la experiencia general. Desafortunadamente, muchos fumadores no son considerados y no desechan sus residuos adecuadamente. Debido a este problema, se restan dos estrellas de la calificación, ya que se siente como caminar por un campo minado.