Llegar a esta hermosa playa es toda una aventura y no es fácil. Los últimos kilómetros implican conducir cuesta abajo por caminos de grava y, eventualmente, llegas a un punto donde no puedes seguir en coche sin arriesgarte a quedarte atascado. En nuestro camino de regreso, nos quedamos atascados una vez, pero logramos liberarnos rápidamente. A pesar de los desafíos, ¡valió la pena! Estacionamos nuestro coche un poco más arriba donde el camino de grava era más ancho y caminamos unos 500 metros para llegar a la playa. El descenso y el ascenso fueron bastante agotadores, así que asegúrate de usar zapatos resistentes. Sin embargo, tuvimos toda la playa para nosotros solos y fue perfecta para hacer snorkel. Definitivamente volveríamos. Si estás buscando una aventura y quieres encontrar una playa apartada en Rodas, ¡este es el lugar para ti! 😁