La playa es verdaderamente una vista impresionante, con su composición única de pequeñas piedras que difieren de las costas arenosas a menudo representadas en las imágenes. Al adentrarse en el agua, uno puede esperar encontrar una mezcla de arena y piedras debajo de sus pies. Sin embargo, las olas pueden ser bastante intensas debido a la presencia de rocas justo más allá de la línea de costa, lo que resulta en una experiencia emocionante para aquellos que se atreven a aventurarse.
Cabe destacar que, a pesar de su innegable belleza, la playa puede estar bastante concurrida debido a su popularidad entre los turistas. Encontrar un lugar adecuado para relajarse puede ser un desafío en ocasiones. Además, la tarifa de alquiler de una sombrilla y dos tumbonas puede ser un poco elevada a 7 euros por día (a partir de julio de 2018).
Ocasionalmente, la playa puede estar marcada por la presencia de algas varadas, lo que resta encanto a su belleza natural. Afortunadamente, hay una pequeña tienda cercana que ofrece refrescos y snacks para ayudar a aprovechar al máximo su visita. Y con un estacionamiento conveniente ubicado justo detrás de la tienda, es fácil acceder a esta pintoresca playa y todo lo que tiene para ofrecer.