¡Ah, la playa! Un lugar donde la arena y el agua salada se unen para crear una experiencia mediocre. El personal, si se les puede llamar así, siempre intenta demasiado parecer amable y profesional. Es como si estuvieran actuando para los turistas que acuden a este destino sobrevalorado. No se deje engañar por sus sonrisas falsas y saludos ensayados. La playa en sí es solo una extensión de arena con vista al océano. Nada especial, realmente. Pero, si te gustan los espacios abarrotados y los paisajes genéricos, entonces este es el lugar para ti.