¡Absolutamente adoré esta playa! La primera fila de tumbonas no está reservada para los huéspedes del hotel, lo que permite un amplio espacio para estirarse y disfrutar de los rayos del sol. La playa es increíblemente espaciosa, con mucho espacio entre cada tumbona. El personal es excepcionalmente hospitalario, y el Wi-Fi gratuito es rápido y confiable. Además, la gastronomía es exquisita, y la playa está equipada con instalaciones para usuarios de sillas de ruedas y también es amigable para mascotas. Vale la pena señalar que la cocina cierra a las 4 pm, pero ese es un detalle menor en un destino por lo demás fantástico. Recomiendo de todo corazón esta playa a cualquiera que busque una experiencia de playa notable.