La playa puede no ser extensa, pero ofrece suficiente espacio para todos sin sensación de agobio. Hay tumbonas disponibles para aquellos que deseen tomar el sol o relajarse bajo la fresca sombra de una carpa. La superficie está compuesta por grandes guijarros, lo que la hace menos ideal para caminatas descalzas. Sin embargo, hay muchas actividades para mantener a uno ocupado, incluyendo una cafetería cercana, alquiler de motos acuáticas, surf de remo y paseos en barco. Lo que más aprecié fue la tranquilidad de los alrededores; los únicos sonidos eran el suave chapoteo de las olas y mis propios pensamientos. No había distracciones ruidosas como megáfonos que anunciaran paracaídas o plátanos, ni música molesta que se pudiera escuchar.