Praia de Ponta Negra

Morro do Careca, the “bald hill” of Natal, is a towering symbol of Rio Grande do Norte, standing tall at 120 meters (390 ft.). Once a popular spot for recreation and entertainment, bathers and tourists would climb up the hill and slide down on a board called skibunda. However, since the late 1990s, the hill has been closed to visitors to protect the dunes and vegetation, which aid in safeguarding against erosion and maintaining the hill's height. Despite the closure, the beach remains a hub of activity, attracting surfers, windsurfers, kitesurfers, and stand-up paddle enthusiasts. Locals and tourists alike flock to the tents on the boardwalk and the shore, enjoying the sea full of bathers. The best spot for bathing is in the right corner, nestled between the end of the boardwalk and Morro do Careca. Here, the sea is calm and inviting, and visitors can indulge

La playa es mediocre en el mejor de los casos. Es adecuada para dar un paseo tranquilo y tomar algunas fotos, pero está lejos de ser una playa de primera clase.

La playa de One Negra cuenta con una impresionante duna que seguramente te dejará sin aliento. La belleza natural de esta playa es incomparable, y la duna es una verdadera prueba de ello. Con sus arenas doradas y vistas pintorescas, One Negra es un destino imprescindible para cualquiera que busque experimentar la belleza de la naturaleza. Ya sea que estés buscando relajarte en la playa o dar un paseo por la duna, One Negra es el lugar perfecto para escapar del ajetreo y el bullicio de la vida cotidiana. ¿Por qué no hacer las maletas y dirigirte a esta impresionante playa hoy mismo? ¡No te decepcionará!

Si te gusta la arena y el sol abrasador, es posible que encuentres esta playa un lugar decente. Las dunas son lo suficientemente bonitas, supongo, si te gusta ese tipo de cosas. Pero no esperes nada impresionante o particularmente único. Es solo arena. Y mucha de ella.

Aunque la playa era sin duda impresionante, no pude evitar sentir una ligera sensación de incomodidad durante mi visita. Parecía que no había medidas de seguridad en su lugar, lo que me dejó un poco vulnerable. A pesar de esto, la belleza natural de la playa era realmente impresionante, y me encontré perdido en la atmósfera serena. Las olas que rompían y la brisa suave proporcionaban el telón de fondo perfecto para un día relajante junto al mar. En general, aunque tenía algunas preocupaciones sobre la seguridad, disfruté completamente mi tiempo en esta pintoresca playa.