Durante muchos años, mi familia y yo hemos explorado las hermosas playas de nuestro país, pero ninguna nos ha resultado tan cómoda como esta. La playa se extiende por kilómetros, flanqueada por una doble vía que corre paralela a ella. A lo largo de un lado de la playa, hay un impresionante camino para caminar adornado con moreras negras y adelfas en el otro. El alojamiento a lo largo del camino seguramente impresionará a cualquiera que se hospede allí. El mar es cristalino e invitante, y la playa en sí es espaciosa y acogedora. Los vendedores locales son amables y acogedores, lo que convierte a este destino en verdaderamente inclusivo. Recomiendo encarecidamente visitar y alojarse aquí. Mi familia y yo pasamos ocho días aquí a principios de julio de 2021, y nuestro apartamento era encantador y asequible, con un costo entre 150 y 250 TL.