La playa presume de una impresionante vista de guijarros negros de tamaño mediano que hacen un paisaje pintoresco. Es un lugar ideal para aquellos que aman nadar en aguas profundas, hacer snorkel y buceo. Sin embargo, puede que no sea adecuado para aquellos que prefieren vadear en aguas poco profundas, ya que solo hay una zona limitada de aguas poco profundas, aproximadamente 10 pies, antes de que el fondo caiga inmediatamente a 20 pies. Caminar sobre los guijarros en aguas poco profundas puede ser desafiante ya que tus pies se hundirán profundamente. No obstante, las aguas más profundas son perfectas para nadar.
Para los entusiastas del buceo, esta playa es una visita obligada ya que ofrece una experiencia única con sus interesantes formaciones rocosas que no se encuentran comúnmente en otros sitios de buceo de Big Island.
La ubicación remota de la playa asegura que permanezca tranquila y pacífica, con menos turistas alrededor. En general, esta playa es un gran lugar para aquellos que aman las actividades en aguas profundas y quieren disfrutar de un ambiente sereno.