Esta franja de costa requiere un poco de esfuerzo para llegar. Deberás conducir hasta la Playa Kalavojna, y luego seguir la línea costera más allá de la Playa Provaža. Asegúrate de llevar calzado resistente y suficiente agua para el trayecto. Aunque no es raro avistar uno o dos veleros en verano, es probable que tengas la playa para ti solo. El agua es prístina y el ambiente es verdaderamente único. Recuerda recoger cualquier basura que traigas y hacer tu parte en la preservación de la belleza natural de la zona.
Este pequeño pedazo de paraíso es una verdadera joya, escondida de las masas de bañistas. Sentirás como si hubieras tropezado con un refugio secreto, con la cantidad justa de cobertura arbórea para mantenerte fresco y cómodo. Confía en nosotros, no extrañarás en absoluto las multitudes.